Ansiedad nocturna 1, Maite 0
- Maite Bermejo Astiz
- 4 dic 2018
- 2 Min. de lectura
Hace días que me encuentro mal. Miro a mi alrededor, y no veo nada claro. Ahora empiezo a entender a mucha gente de la que estaba a mi alrededor. Problemas. Es fácil decir que somos human@s y que tenemos problemas. Pero, ¿y si de verdad lo son, y son graves o difíciles de combatir o solucionar?
Me paré a pensar por un momento. Sólo sentía dolor y malestar. Me duele el cuerpo entero. Siento una opresión en el pecho que a veces me hace tanto daño que hasta me dan pinchazos. Se me ocurre ir al médico por si hay algún problema. y me dice que CREE que es un tirón o algo así muscular. ¿Qué hago ahora? Me receta algo que no puedo tomar, y que encima para hacerlo necesito un protector de estómago, pero no me dice nada. Compro el producto, leo el prospecto, y bueno, a la hora empecé a vomitar. Una sensación de estar pudriéndome por dentro terrible. Llamo a mi ama, asustada, y me pide que especifique el medicamento y que esté tranquila. Evidentemente, era una bomba para mi cuerpo.
Llega la noche. No puedo dormir, qué bien. Me empiezo a agobiar. Respiro cada vez más fuerte y más veloz. Me tumbo para intentar conciliar el sueño, y noto pinchazos en mi pecho izquierdo. Me duele muchísimo. Son las 01:30h de la madrugada. Estoy muy agobiada, y con temor, llamo a mi ama porque veo que tiene el móvil operativo. Me aconseja que llame al 112 y que me digan qué hacer. Lo hago, me mandan a un médico en la otra punta de Bilbao, y decido ir a esperar, gracias a los consejos de mi compañera de piso.
A base de ver pelis y series, empiezo a quedarme dormida. Duermo 3 horas esa noche. Probablemente, una de las peores noches del año.
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